Wednesday, November 08, 2006

Las nubes

Yo no soy de las que miran a las nubes. Las veo ahora porque no tengo más remedio: es lo único visible desde mi ventanilla.

¿Qué dicen los poetas de ellas? ¿Las llaman diosas suspendidas?

Este campo alucinógeno de amapolas blancas y amantes complacientes me recuerda a mí. Por liviana e impredecible. Por efímera y vagabunda. Por estar a punto de no ser, sólo lágrimas condensadas.

Me recuerdan a mí por atormentada.